El Tigre optó por los de antes y acabó goleado
El Tigre ni siquiera tuvo chispazos de buen fútbol, pese a que en el arranque presentó a diez jugadores del plantel de la temporada pasada, quienes ya tienen una idea de la propuesta futbolística del técnico Eduardo Villegas; éste optó por poner de entrada sólo a uno de los refuerzos: Marcos Barrera, quien además fue el último en llegar (sólo trabajó unos días) y aportó poco.
El equipo careció de un armador, de un hombre pensante en la mitad de la cancha. Extrañó a Pablo Escobar, fundamental en esa zona a la hora de generar fútbol. Tampoco tuvo peso ofensivo.
Nadie tomó la posta del Pájaro. Ernesto Cristaldo, otro que llegó tarde, apenas apareció en el partido, como la mayoría.
El DT se guardó para el segundo tiempo a Mauricio Saucedo y Daniel Chávez, dos caras nuevas que llegaron como refuerzos. En cambio, no entró Wálter Veizaga.
El técnico
Bolívar fue dominador e hizo el gol de entrada, con ese cuadro Eduardo Villegas no dio en el clavo y no halló respuesta para contrarrestar al rival.
El equipo
Fiel a su estilo, el entrenador conservó el dibujo táctico: 4-4-2; pero el juego de conjunto estuvo ausente, y no hubo un hombre que desequilibre.
Marcos Barrera
Sólo tres días de prácticas no le alcanzaron al defensor argentino para complemen-tarse con sus compañeros de la última línea.
Mauricio Saucedo
Pasó desapercibido el volante cruceño. Ingresó en el arranque del segundo tiempo y apenas tuvo contacto con el balón. Estuvo impreciso en los pases.
Daniel Chávez
La actuación del ex La Paz FC fue similar a la de Saucedo. Jugó 45 minutos y no terminó de entrar al juego. Sólo escapó una vez por el ala derecha.
(La Razon)
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