La eliminación de la Copa Sudamericana, por Guaraní de Paraguay, profundizó las heridas que tiene Oriente. Si hasta antes de enfrentar a los paraguayos, en el duelo revancha, las críticas iban dirigidas al mal funcionamiento en las dos últimas fechas del torneo local, se tenía la esperanza de que con el 1-0 conseguido en Asunción la clasificación estaba en bandeja.
El plantel volvió a entrenar en su sede del barrio El Trompillo y hoy viajará a Mairana para trabajar durante tres días en esa población, distante a 137 km de esta capital.
(El Dia)
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